Turismo Religioso

 

 

Basílica Del Señor de los Milagros

 La historia del Señor de los Milagros inicia en torno a un acto de bondad, de una mujer indígena que, dio todo lo que tenía para sus necesidades; esta mujer, - una lavandera- se compadeció de un hombre que iba a ser encarcelado por una deuda; la mujer que estaba por aquel sitio donde llevaban al hombre, había ahorrado con mucho esfuerzo un dinero con el fin de comprarse un Cristo, y tenía la cantidad exacta por la cual iba a ser encarcelado el hombre… la mujer movida por la compasión entregó todo su dinero para que el hombre recobrara la libertad.
Pero Dios le recompensaría su generosidad, con su misma presencia. Estando ella en su oficio, descubrió en el interior de un río un crucifijo que hacia 1573 comenzó a ser venerado en la choza de la indígena y posteriormente en una ermita.
La imagen se fue deteriorando a tal punto que el delegado del obispo de Popayán – en 1619- tomó la decisión de incinerar la imagen porque, según el visitador episcopal, la imagen ya no inspiraba devoción. Pero, la imagen no se consumió y permaneció íntegra; desde ese momento se le ha llamado El Señor de los Milagros.
En 1702 se ordenó la protección de la imagen, siendo expuesta sólo durante la celebración de la Eucaristía. En 1737 la Diócesis de Popayán envía un sacerdote para que se encargara del cuidado de la imagen y del servicio pastoral en la ermita.
En 1884 al ver que el templo estaba, muy deteriorado, el Obispo de Popayán resolvió traerse una comunidad religiosa, y fue así como la comunidad de Padres Redentoristas llegó a Buga en medio de una gran expectativa. El primer superior de la comunidad fue el padre Alfonso París de origen francés, quien junto con presbíteros que lo acompañaron, al poco tiempo con donaciones de los fieles, iniciaron la construcción de actual Basílica.
El 2 de agosto de 1907 en la fiesta de San Alfonso María de Ligorio, fundador de los Redentoristas, se realizó la Solemne Bendición e inauguración del nuevo templo, a la que asistieron grandes personalidades entre ella el Nuncio Apostólico, Monseñor Francisco Ragonessi y el nuevo Arzobispo de Popayán, Monseñor Manuel Antonio Arboleda y numerosos fieles devotos venidos de diferentes sitios del país.
Por medio de su secretario el Cardenal Pacelli (futuro Papa Pío XII) en 1937 el Papa Pío XI expidió un Decreto concediéndole el Titulo de Basílica, debido al alto número de milagros y la cantidad de peregrinos que llegaban (más de 800.000 anuales).1
El reloj de la torre es de fabricación francesa, pesa 1402 Kilogramos…marca la hora desde el 18 de Marzo de 1909.

1Tomado de: Diócesis de Buga 1966-2016 50 Años. Cali, Noviembre de 2016 .Página 17

 

Catedral de San Pedro

La Catedral de San Pedro fue declarada como Monumento Nacional por la Ley 163 de 1959; Decreto 264 de 1963. Hoy en Bien de Interés Cultural, Nivel I, PEMP, según Resolución 03 04 de 2010, Ministerio de Cultura.
Se trata de una Iglesia de tres naves, separadas por esbeltos pies derechos, con espadaña adosada a los pies, al lado del Evangelio, y capilla Mayor cuadrada, separada de la nave central por un arco toral. La cabecera de la iglesia mira hacia el oriente. El edificio hace esquina con el Parque Cabal, antigua Plaza Mayor, hacia donde abre su puerta lateral – Puerta falsa o puerta del perdón-, en tanto que su fachada principal da hacia la “Calle de la Iglesia” (actual Carrera 15), en una disposición similar a la que tienen las catedrales de Santo Domingo (República Dominicana) y de Quito (Ecuador).
La Iglesia fue restaurada en 1965. Se restauró la fachada y se hicieron reparaciones generales en las cubiertas, se retiraron las baldosas de cemento y se repuso el enladrillado antiguo en las naves, presbiterio y sacristías; se restauraron los retablos, que habían sido pintados al duco, y se restituyeron las piezas ornamentales que les faltaban. La restauración arquitectónica fue dirigida por el arquitecto Diego Salcedo Salcedo; la restauración de los Retablos estuvo a cargo del artista Dolcey Vergara.2
Para Buga, es ésta la casa solariega profundamente ligada a su historia, a su tradición, a su religiosidad, a su hidalguía y a su señorío durante más de tres siglos.
Desde el púlpito, que es toda una obra de arte, que tal vez no hemos sabido apreciar en su auténtico valor, se proclamó la palabra de Dios a muchas generaciones.
Toda esta Catedral es un camposanto sagrado, donde reposan las tumbas de los fundadores, y primeros pobladores, junto con las de los próceres de la Independencia y las de los abuelos de muchas generaciones.3

2 Por Jaime Salcedo Salcedo. Tomado de: Diócesis de Buga 1966-2016 50 Años. Cali, Noviembre de 2016 .Página 156
Por Julián Mendoza Guerrero, Primer Obispo de Buga. Tomado de: Diócesis de Buga 1966-2016 50 Años. Cali, Noviembre de 2016 .Página 157

 

Templo San Francisco

Entre los nombres que ha recibido figuran Capilla de Jesús de Nazaret o de Jesús Nazareno, Capilla del Colegio de los Jesuitas y Ermita de Jesús Nazareno. Se ubica en el cruce de la Calle 5ª. (Calle de San Francisco) con Carrera 14 (Calle de la Ermita o Calle del 20 de julio), se separa por una manzana de la Catedral de San Pedro Apóstol y una cuadra de la Basílica Menor del Señor de los Milagros, en la Zona 1 (Área fundacional) del Centro Histórico de Buga.
Es una sencilla iglesia de una nave construida en piedra labrada, con coro y balcón. Sobre la entrada principal hay un ventanal protegido con reja de hierro que cumple la función de iluminar el coro; en la fachada principal, se localiza una pequeña plazoleta en piedra, desde esta se accede a un convento antiguo y a un corredor de ahí se accede al segundo piso. Por encima la entrada derecha, también llamada del perdón, se localiza grabado el año de construcción -1746-.
Su construcción corresponde al jesuita alemán Simón Schenher, afectada por un sismo en 1766, por lo que su frente fue retocado en 1870 y posteriormente, el término de la torre; con la exclusión de los Jesuitas, la Capilla de Jesús Nazareno –nombre que recibía en esa época-, fue abandonada, y cayó en manos de la tercera orden de San Francisco, hasta 1970 cuando se llevó a cabo su restauración, fue entregada a la Diócesis de Buga, que la dirige desde aquel tiempo.
Es de arquitectura sencilla en estilo colonial español, de elegante portada principal, en piedra labrada, da su frente a la pequeña plazoleta o atrio en piedra; sobre el friso de ésta se ve una antiquísima ventana que ilumina el coro.4

4 Por Académico Pbro. Fabio Gabriel Villalobos Hurtado. Tomado de: Buga la Real. Boletín de divulgación de la Academia de Historia “Leonardo Tascón”. Volumen 1 No 7, segunda Época. Buga, marzo de 2005, páginas 25-28.